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Ayuda en Acción
Nuestra visión de largo plazo para el ADT San Lucas pasa por el cambio de comportamiento de las personas, familias y diferentes colectivos que forman parte del territorio. Así, esperamos que las personas que viven en el ADT, independientemente de su edad, sexo, grupo cultural al que pertenezcan o piso ecológico en el que vivan, conozcan sus derechos económicos y sociales, sepan ejercerlos, estén dispuestas a defenderlos y a exigir su cumplimiento a favor de todos. Esperamos que las personas hayan desarrollado sus capacidades para analizar su realidad, identificar sus problemas y potencialidades, proponer soluciones y mejoras de manera creativa e innovadora; tengan capacidades de adaptación y sean resilientes ante situación de riesgo; tengan competencias en la gestión alimenticia, productiva y comercial, manejen rentablemente sus emprendimientos económicos, individuales y colectivos, sean gestores de incidencia en políticas y espacios favorables para la dinamización de economías personales, familiares y asociativas. Que las autoridades: hombres y mujeres, ejerzan liderazgos económicos y sociales inclusivos, solidarios y democráticos. Que los valores de la solidaridad, reciprocidad, equidad, trabajo conjunto y buen trato sean los más apreciados y trabajados en las escuelas, postas, sindicatos, ayllus y organizaciones en general. Que haya organizaciones e instituciones públicas, privadas, comunales y mixtas, redes, concejos, movimientos tengan capacidad de trabajar conjuntamente para generar y garantizar condiciones que sostenibilicen los cambios y estén comprometidas con la generación de un ambiente favorable, saludable y seguro para que los niños y niñas, los jóvenes, los hombres y mujeres adultos y adultos mayores puedan alimentarse, jugar, estudiar, innovar, trabajar y vivir felices en San Lucas.
Productores y emprendedores han mejorado sus sistemas y condiciones de producción.
Calidad educativa mejorada para la población de niños/as y adolescentes.
Reducir la desnutrición y los casos de enfermedades endémicas de
niños y niñas menores de 5 años.
Niñas, niños y adolescentes ejercen y disfrutan sus derechos.
Sociedad más igualitaria que promociona los derechos sexuales y reproductivos.
Reducción de casos de violencias que afectan a las mujeres.
Las mujeres tienen autonomía económica.
Familias y comunidades gestionan su territorio.
Las comunidades son resilientes frente a las crisis.
Ciudadanía y sus organizaciones participan en sus espacios de toma de decisiones.
El programa se desarrolla a partir de 8 ámbitos:
Las principales acciones previstas para 2018, están centradas en el ámbito de Dinamización de Economías Locales, con productores/as de durazno y miel; Condiciones de Vida Saludable a través de la implementación de un programa de educación alimentaria nutricional; Educación, con el acompañamiento a los procesos de mejoramiento de calidad educativa en el nivel secundario; Derechos de las Mujeres, implementando emprendimientos productivos y fortaleciendo las organizaciones de mujeres; y Vínculos Solidarios, a partir de la conformación de redes comunales de apoyo a todo el proceso de ejecución de actividades.
Aportar en los procesos participativos de elaboración y operativización de propuestas de desarrollo integrales, sostenibles e inclusivas a nivel local y regional; en el marco de las autonomías territoriales, para responder efectivamente a los problemas de pobreza, desigualdad, cambio climático y ejercicio de derechos de la población vulnerable.